El bien y el mal, la definición de estos conceptos no es universal, no es generalizable para los monos como ya he dicho anteriormente.
El bien de un mono lo justifica el propio mono. La ética por tanto no tiene sentido más allá de mi mismo, la ética no se puede traspasar entre monos como si fuese un libro de preguntas y respuestas comunes a todos.
Pero entonces ¿qué es lo bueno y lo malo para mi?, ¿cómo puedo llegar a conocer la definición de bueno y malo para mi persona?.
Sólo ha dos formas de actuar bien, la consciente y la inconsciente.
Empezaré por la segunda.
Si tu bestia domina tu voluntad, es común que tu bien esté asociado al más puro hedonismo sensorial. Es decir, lo bueno es aquello que te da placer y un placer rápido, intenso y que te sobre excita con facilidad. Lo bueno no entiende de mañana, y tan sólo vive del corto plazo.
El mal, en este tipo de mono, está vinculado a todo aquello que produce ruptura del hedonismo sensorial, todo aquello que le separa bruscamente de su objetivo. Pero cuidado, no quiere decir que este tipo de mono se frustre o se enfade con facilidad, simplemente digo que para este animal, el mal será aquello que le prive de conseguir lo deseado.
En cambio el mono que actúa de forma mayoritariamente consciente, es un mono que planifica, que evalúa sus intereses a corto, medio y largo plazo, que selecciona sus objetivos y guía su conducta hacia su consecución. Para este mono el bien es tanto la existencia del objetivo como el camino que deberá de recorrerlo para obtenerlo, y el mal es no tener objetivo o no poder llegar a conseguirlo, ya sea por incapacidad propia o por un agente externo que se lo impida.
Despierta mono, no sea bobo, el mundo no es blanco y negro, frío y calor, supera ya la dicotomia conceptual, no existe una única forma de bien y de mal, ni dos tipos puros de actuación para los monos.
Un mono puede ser para un objetivo muy meticuloso y preciso, y jugar al largo plazo, y para otro objetivo ir a corto, se trata de que aprendas a diferenciar que dos fuerzas tienes dentro de ti y como debes aprender a catalogar tus acciones y por lo tanto a generar tu propia ética.
Si uno consigue conocerse tan profundamente, siendo capaz de entender cuales son sus necesidades, sus deseos profundos, sus objetivos sociales y toda la mierda y maravilla que lleva dentro, la vida se le hará más sencilla, porque llegará a ser capaz de colocar por si mismo el bien y el mal que desee, llegará a elegir aquello que llena su vida y aquello que la vacía, pero para eso... hace falta tener capacidad para poder hacerlo.
La ética es individual, y está vinculada a la bestia que habita en cada uno de nosotros y en nuestra racionalidad. La ética de cada uno puede ser pura o una mezcla entre la consciente y la inconsciente. El mono puede llegar a ser capaz a través de un profundo conocimiento propio de confeccionar una ética propia absolutamente racional, y esa ética tan absolutamente racional puede ser una ética... absolutamente perniciosa para el resto de la sociedad.
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